Da gusto pasar la noche en medio del P.N. de la Caldera de Taburiente, eso sí, mejor evitar la noche del viernes y especialmente del sábado, según leí en algunas opiniones hay grupos y puede haber bastante ruido, también leí quejas sobre algún botellón… no sé si es muy frecuente, pero por si a caso nosotros lo organizamos para que fuera la noche de domingo a lunes y así asegurarnos tranquilidad, que a eso venimos!
Como he comentado en el post anterior, se puede solicitar gratuitamente a través de la web Reservas Parques Nacionales, con algunos días de antelación. Como en la misma Zona de Acampada hay un pequeño Centro de Visitantes, cualquier cosa que necesitemos se lo podemos consultar sin problema, tienen un personal muy amable; de hecho, gracias al chico de la caseta que nos hizo un gran favor prestándonos la capa impermeable de una tienda (nosotros solo llevábamos la base para no ir tan cargados, no pensamos que bajaran tanto las temperaturas en esta época del año!), de no haber sido así…no hubiéramos pasado tan buena noche!
Bueno, ya lunes por la mañana después de nuestro desayuno, damos un último paseo por las pozas aprovechando que aún no hay nadie, recogemos todo y de vuelta para el parking de la viña a buscar el coche. El camino de vuelta lo haremos por el Barranco de las Angustias, son unos 7 km desde la Zona de Acampada (750 m) hasta el Parking de la Viña (240 m) que será el punto de llegada.
El camino no tiene pérdida, sólo tenemos que seguir las indicaciones; no tardamos mucho en encontrarnos con el famoso Reventón, si, como su palabra indica se trata de un fuerte descenso que nos reventará las piernas! Justo después nos encontramos con un cartel que nos indica un atajo «para caminantes expertos», es un tramo estrecho y un poco más expuesto (evitar en caso de vértigo), no tiene dificultad, pero si no lo tenemos claro seguimos por el otro camino, sube un poco y vuelve a descender.
Ya no tardamos mucho en llegar al Barranco Rivanceras o Limonero donde veremos el desvío de 500 m hacia la Cascada de Colores. Primero nos encontramos una pequeña cascada de agua potable, es una buena opción para refrescarse ya que la de colores suele estar más seca y además huele a oxidado.
Seguimos un poco más, vamos viendo esos colores más anaranjados y finalmente llegamos a la famosa Cascada de Colores! Desde la zona de acampada hasta aquí hemos tardado 1 hora, a un ritmo ligero.
Deshacemos el último tramo hasta el desvío y seguimos por el barranco, hasta llegar al cruce de Dos Aguas (se cruza otro pequeño arroyo de nuestra derecha), ahí pueden parecer un poco confusas las señales, pero hay que seguir recto, saltar las piedra para cruzar el arroyo y en seguida volvemos a ver las indicaciones para asegurarnos que vamos bien.
Ahora el camino es más aburrido, y aún nos quedan 4 km… iremos de un lado al otro del barranco, siempre siguiendo las señales, el último tramo ya en llano será por el mismo barranco seco; cada vez nos impacientamos más, y el calor se va haciendo más insoportable… después de 2 horas llegamos por fin al coche, y qué gustazo ponerse las chanclas!!
Desde la zona de acampada hemos tardado casi 4 horas (contando con el descanso de la cascada de casi 1 hora), no es mucho, hay quien sube desde el parking hasta la cascada (5 km) y vuelve, aunque no lo aconsejo, vale la pena llegar hasta la zona de acampada y recorrer la zona.
Como no tenemos prisa tampoco seguimos ninguna ruta en concreto y vamos un poco según la marcha. Como lo que más nos apetece es un baño nos vamos al Puerto de Tazacorte, la playa más cercana, donde nos comemos unas papas locas para recuperar energía!
Después de habernos «duchado» y de haber comido algo, pasamos por algún super para comprar provisiones; tenemos las piernas muy cansadas como para dormir en el coche, y de las 3 zonas donde está permitido acampar en la isla de La Palma, la más conveniente es la de la Laguna de Barlovento, así que nos cruzamos la isla y ahí vamos!
Nuevo dominio: www.felicidadsinfronteras.com 
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